La ida y la vuelta en avión fueron bien. Mejor de lo que pensaba. Secuencia de emociones del miedo. Siempre la misma. El desconocimiento viste al miedo con ropas de las que después la realidad le despoja y tiene uno la sensación de haber sufrido en vano y de haber hecho el mayor de los ridículos.
De las buenas nuevas te he avanzado algo: Colaboración en radio y la creación de emisora propia. Tengo pendiente la crítica de los cuentos del guerrillero y algún cameo en algún otro sitio, que sin la agenda que ya nadie profana a la vista, ahora no recuerdo.
Pendientes de alguna que otra reunión: va a ser un verano movidito para las dos. La entrevista te la paso al correo para que te deleites en privado que los tachones de petulancia no me sientan bien, igual que las rayas horizontales en las camisetas...
Como te anuncié la defunción del presente-futuro best-seller llegará a la hora prevista.
El otro, el libro de cuentos que guardo para ti y para mí, estará finalizado en Septiembre y alguna que otra osadía literaria que seguro olvido mencionar a propósito.
Los que me rodean parecen estar fuera de control por momentos Eva: gente que corre detrás de sus vidas, mientras que mi Era de tomar las riendas lleva un tiempo existiendo. La gente va muy rápido o yo estoy ralentizando mi ritmo a pesar de mi hiperactividad característica.
Una extraña capacidad para reflexionar desde la mayor de las objetividades o que el mundo se ahoga en un vaso de agua y dificulta así mismo su propio porvenir y su venir de ahora por entretenimiento, adicción o ignorancia.
Recién hallo sobre este tema la reflexión del Caín de don José : TODO ES PRESENTE. " Esos cambios súbitos de presente" como le ocurre al protagonista, que a veces dice ser Abel, y viaja continuamente a través de la historia de la Biblia, al pasado y al futuro que un dios rencoroso y caprichoso dibuja a su disposición.
Quizá compartimos el autor y yo insolencia para llamar de cierta forma a dios-siento la minúscula Eva-, y desde el sentido del humor que los años te van otorgando se nos abre la puerta a una visión de las cosas en pantalla ajena y HD. Algo beneficioso y/o perjudicial, según el caso.
Quizá como Unamuno, somos cristianos y no queremos serlo porque nuestras retinas sufren de Hiperrealismo. Llegó el portugués al final de su vida a una tregua con Dios de eso estoy segura: ¿estaré haciendo las paces con el de arriba o conmigo misma?
Descubro también la semana pasada el manifiesto de Ángeles Caso (te lo dejo por abajo aunque dudo que tú no lo hayas leído), todo un ejemplo de salubridad mental y vital que, con el cambio de hábitos necesario, viene siendo lo mismo.
Rechazo el cinismo, igual que la periodista, de esta "suciedad". Por alguna entrada que otra, te habrás dado cuenta. Vivir acorde con uno mismo es importante en la época del individuo 3.0. Aunque respeto que cada cual haga lo que quiera con su vida y con su Ipad. Mientras, también averiguo que Rosa Simón está luchando por el Autismo. Sigo siendo una groupie de la filantropía.
Libertad y espíritu crítico al precio que sea, aunque meses después mi cerebro vuelva a darse una vuelta por aquella cárcel y otras que hace siglos abandonó. Es fundamental y gratis lo de pensar un poco. Altamente recomendable también. Aunque los dirigentes del mundo inventen aplicaciones que lo hagan por nosotros. ¡Qué cómodo!
Tanta metafísica que mis dedos derraman probablemente sea una maniobra de despiste. Tal vez no quiero contarte que, ayer, estando en nuestra terraza, el diván de terapia habitual, mientras Goyo y Antonio contaban su día en el trabajo, Azul entraba con una mujer en el edificio de en frente. No dije nada. Mis sentidos se concentraban en la boca de mi estómago y sólo intentaba que mi cara no reflejara la superposición de presentes(http://mireinoportublog.blogspot.com.es/2013/04/omeprazol-por-favor.html).
No reparó en mis dos toneladas de pelo recogidas en un moño. No pude evitar trasladarme a mi presente de ayer y adentrarme de nuevo en aquel universo paralelo en el que Segovia no existe y Azul y yo vivimos felices juntos.
Y tampoco en mi presente, en el de ahora, donde tengo el firme convencimiento de que algunas cosas son imposibles.
Traté de sanear mis sinapsis con algo de música (movidita por supuesto) una vez llegué a mi casa de mi presente actual, y, ya calmada conseguí evadir mis pensamientos teñidos de mi color favorito durante el resto de horas del día.
- Tenemos que vernos. Creo que ayer te vi en Moratalaz tomando algo???
Es el mensaje que esta mañana, al despertar, leía en mi teléfono.
https://www.facebook.com/notes/womanword/manifiesto/506418199407587
http://www.elpais.com/especiales/2009/tuslibros/cain/interior.html
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